Casos y Cosas de Jill

Tuesday, July 18, 2006

¿Quién quiero ser?

Sucede que me tocó trabajar con dos mujeres muy perronas, Mary Beth Collura y Soledad Galíndez. Wow, se imaginarán que estas dos chicas ya son grandes, no sé, medio histéricas y con gusto debo decir que no es así. Conocí a dos mujeres de negocios buena onda, bromistas y muy comprometidas con su trabajo.

El primer día empezó una de esas pláticas que intentan hacernos olvidar que estamos trabajando, de hecho es un tema clásico entre mujeres profesionistas (y que ejercen, claro) los hijos y la casa.

Soledad tiene una bebé muy bonita de casi un año y les mentiría si les dijera cuánto tiene Emily, la niña de Mary. Ambas platicaban sobre lo lindas que son sus niñas y se les escuchaba feliz de ser mamás e inclusive platicaban sobre el futuro crecimiento de sus familias.

Algo que me dejó pensando fue cuando Mary dijo que no pudo despedirse de su hija antes de venir a México porque al parecer la niña le empieza a pedir que la lleve con ella...que haría yo si mi niña (o niño =) ) me pidiera eso? ¿Podría salir a gusto? Soy tan chillona que me pondría a llorar con ella.

Y fue cuando empecé a pensar ¿qué quiero para mi futuro? ¿Tener un trabajo muy perrón que me paseé por el mundo (Mary acababa de pasar un tiempo en Tokio)? ¿Ser una exitosa profesionista? ¿Alguien de renombre? ¿O quiero ser una mamá 100% y así no perderme de mi familia, de mis hijos, de mi marido?

¡Rayos! ¡Acabo de escribirlo y vuelvo a dudar! Porque cuando pienso en lo bien que me siento ejerciendo mi carrera, en lo desesperante y a la vez reconfortante que puede llegar a ser no quiero dejarlo, pero lo vuelvo a pensar y estoy segura que ninguna carrera (¡ninguna!) puede ser mejor que la carrera de ser mamá.

Y con todo esto, ¿qué me queda?, no me queda mas que ser una persona aún mas ambiciosa, no desear ser una profesionista exitosa O una gran madre, como grandiosa mujer que soy voy a tener que arreglármelas para ser tan buena madre como buena profesionista.

De algo si estoy segura, jamás mi vida privada tendrá que ajustarse a mi vida profesional y porque se le puede poner precio a mis servicios como profesional, pero no a mi vida personal.
El ser una mujer del nuevo siglo no debe hacerme olvidar lo que en verdad vale en esta vida, la compañía de las personas que quiero, la familia, no sé como explicar todo eso...¿pero me entienden, verdad?. Aún hay cosas que deben tratarse a la antigüita y aunque suena a comercial...la familia es primero

1 Comments:

  • At 4:02 PM, Anonymous Anonymous said…

    Your website has a useful information for beginners like me.
    »

     

Post a Comment

<< Home